Stanislavski, nuestro comienzo para el análisis del movimiento.
Posted by sergio sierra on 16:53
El
legado de Stanislavski, llamado por especialistas como Marco De Marinis, el Padre Fundador del Teatro Moderno, en
relación con el estudio sobre el PAE es fundamental para comprender un aspecto
básico de la formación y el entrenamiento físico del intérprete escénico, nos
referimos a la activación de la consciencia corporal como base para el
desarrollo de las acciones físicas, en las que el Principio de Alteración
del Equilibrio PAE subyace
permanentemente y en las que encuentra diferentes caminos para potenciarse como
principio pre-expresivo, recurrente e imprescindible
en el trabajo creativo de todo actor, mimo o bailarín desde el punto de vista
corporal.
El PAE en
la obra de Stanislavski encuentra su núcleo y su potencia expresiva en las
acciones físicas, incrementando en el
actor el domino técnico y el trabajo sobre la forma, los cuales sin una
motivación interna, sincera y vivida no trascienden ni impactan a nivel
energético en el espectador.
Con
la activación de la consciencia corporal,
Stanislavski nos acerca a un primer nivel de comprensión del PAE, en el
cual el equilibro es la base principal a partir del cual se crea, conserva y
transforma el movimiento del cuerpo humano tanto al estar en posición erguida
como al desplazarse.
La presencia del equilibro en Stanislavski se encuentra en la base de la comprensión misma del movimiento corporal, no busca un rol protagónico ni tiene como objetivo el desarrollo de destrezas corporales espectaculares, el equilibrio es desde nuestro punto de vista en esta tradición, el despertar de la consciencia corporal que descubre las fuerzas activas y que tanto puede realizar creativamente el cuerpo del actor.
La presencia del equilibro en Stanislavski se encuentra en la base de la comprensión misma del movimiento corporal, no busca un rol protagónico ni tiene como objetivo el desarrollo de destrezas corporales espectaculares, el equilibrio es desde nuestro punto de vista en esta tradición, el despertar de la consciencia corporal que descubre las fuerzas activas y que tanto puede realizar creativamente el cuerpo del actor.